Por Dr. Antonio Rodríguez Carrión.
La Retinosis o retinitis pigmentaria o ceguera nocturna, es una enfermedad genética ocular caracterizada por degeneración progresiva de las células ambos ojos especializadas en captar la luz, ocasionando una pérdida progresiva de la visión. Afecta aproximadamente a una de cada 4.000 personas, aunque varía según la región o país.
Suele manifestarse entre los 25-40 años de edad, aunque puede aparecer en la niñez o después de los 50 años.
El primer síntoma suelen ser disminución de la visión nocturna o en lugares con poca luz. Seguidamente va perdiendo la visión periférica, conservando la visión como si mirara a través de un tubo. En fases más avanzadas va perdiendo también la visión central y la percepción de los colores lo que indica que ya están dañados los conos de la mácula, siendo frecuente la apareción de pequeños fogonazos de luz (“fotopsias”) y deslumbramientos.
No existe ningún tratamiento que cure o detenga la evolución de la enfermedad.