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Por Dr. Antonio Rodríguez Carrión.
Fiebre en los niños
¿Qué es?
La fiebre es una reacción del organismo ante un agente extraño (microbios, toxinas) o por un fallo en el mecanismo de regulación de la temperatura corporal (por ejemplo: golpe de calor).
¿Cuáles son las principales causas de la fiebre?
a) Fiebre por infecciones: es lo más frecuente
- En los niños suele ser ocasionada por virus respiratorios o intestinales; la mayoría de las veces es de pronóstico leve.
- En otras ocasiones la fiebre es ocasionada por bacterias que afectan a los oídos, senos paranasales (sinusitis), amígdalas y vías urinarias (cistitis). Con menos frecuencia algunas bacterias pueden ocasionar problemas graves al afectar pulmones (neumonía), sistema nervioso (meningitis) o provocar una sepsis.
b) Fiebre por alteración en el mecanismo de regulación de la temperatura corporal:
La inmadurez de los mecanismos que regulan la pérdida de calor en los niños determina que éstos sean muy vulnerables a las altas temperaturas ambientales. Al no poder eliminar el calor, la temperatura del cuerpo sube muy rápidamente a valores superiores a 40 ºC (golpe de calor o insolación), lo cual es muy grave.
¿Cuándo se considera que un niño tiene fiebre?
Cuando la temperatura tomada en la axila es superior a 37,5º C, o si llega a 38º C en el recto (“en el culito”).
¿Cómo se trata la fiebre en los niños?
La fiebre es un mecanismo de defensa que tiene el cuerpo ante diferentes situaciones, especialmente en infecciones, por lo que su tratamiento solo está indicado si causa malestar en el niño.
La mayoría de las veces la fiebre es producida por los virus del resfriado, los cuales ocasionan una enfermedad leve y su tratamiento consiste en aliviar los síntomas: suero en la nariz y aspirar la mucosidad.
Hay que facilitar la pérdida de calor: mantener al niño en la bañera con agua templada durante unos 10 minutos. La ropa debe ser ligera, pero sin que pase frío.
Si tiene fiebre se administra paracetamol. En niños mayores de 6 meses se puede dar ibuprofeno.
Es importante ofrecer agua con frecuencia.
A los niños y adolescentes no se debe administrar medicamentos que contengan ácido acetilsalicílico (Aspirina®), pues se ha asociado con la aparición de un cuadro clínico poco frecuente pero grave (síndrome de Reye).
Signos de alarma en la fiebre
La fiebre por sí sola, sin otros signos, es motivo de consulta al médico cuando la temperatura axilar es superior a los 38,3 ºC en un bebé con menos de 3 meses de edad (superior a los 37,8 ºC si se toma en el recto), o niños mayores con fiebre superior a los 39,5 ºC en el recto, o tiene febrícula durante más de 48 horas.
Se debe acudir a Urgencias cuando la fiebre se acompaña de uno o varios de los siguientes signos:
– Deterioro del estado general: débil reacción a los estímulos, quejido en vez de llanto, adormilado o confuso, poca movilidad (“lacio”), irritabilidad.
– Vómitos o diarreas.
– Dolor de cuello.
– Dolor de vientre.
– Manchas en la piel.
– Dificultad para respirar.
Convulsión Febril
¿Qué es?
La convulsión febril es un cuadro clínico frecuente caracterizado por:
- Aparecer en niños con edad entre 6 meses y 5 años.
- Fiebre superior a 38º.
- Agitación de brazos y piernas.
- Pérdida de conocimiento.
- Ojos vueltos (“en blanco”.
- En ocasiones se queda completamente “lacio” y apenas se nota la respiración.
- Suele durar de 3 a 10 minutos, al cabo de los cuales el niño se recupera totalmente o queda un poco adormecido.
¿Qué hacer?
- Mantener la calma: la convulsión suele desaparecer espontáneamente.
- Lo único que pueden hacer los padres es evitar que el niño se golpee o se atragante si tiene algo en la boca.
- Es conveniente observar cuántos minutos dura la convulsión para decírselo al doctor.
- Llevar al niño a Urgencias para su valoración: aunque cuando el niño llegue a Urgencias posiblemente la convulsión ya ha desaparecido, el médico estudiará las posibles causas de la fiebre (la mayoría de las veces es debido a infección por virus sin gravedad).
¿Cómo evoluciona?
- Uno de cada tres niños que ha tenido una convulsión febril puede tener otra más adelante.
- Hay niños propensos a tener convulsiones febriles, pero ello no altera su desarrollo y la posibilidad de que vayan a ser epilépticos es pequeña.
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Glosario
Bacteria (baktería=bastón): Microbio constituido por una sola célula con un solo cromosoma disperso en el citoplasma (no hay membrana nuclear). Se reproduce por bipartición y vive formando agrupaciones (“colonias”). Es de menor tamaño que la célula humana pero mayor que el virus. Se puede observar con el microscopio óptico. En un gramo de tierra pueden habitar 40 millones de bacterias y un millón en un mililitro de agua dulce. Enfermedades producidas por bacterias son, entre otras muchas, la meningitis meningocócica, tuberculosis, infecciones de orina, amigdalitis, infecciones de la piel.
Febrícula (“décimas”): Elevación de la temperatura bucal entre 37ºC y 38º C durante más de 24 horas.
Fiebre: Elevación de la temperatura bucal por encima de 38 ºC.
Sepsis (sepsis=putrefacción): Cuadro clínico grave producida por penetración de microbios o sus toxinas en el torrente sanguíneo.
Virus: Microbio muy pequeño que no respira, no se mueve, ni crece. El virus no es una célula. Para realizar todas sus actividades, los virus penetran en el interior de las células y las parasitan, apropiándose del material genético de éstas para reproducirse. Es mucho más pequeño que las bacterias y solo se puede ver con el microscopio electrónico. Enfermedades producidas por virus son, entre otras muchas, el resfriado, gripe, sarampión, enfermedad del beso, hepatitis, sida. Tiene gran capacidad para cambiar su comportamiento biológico (“mutación”). Los antibióticos son efectivos contra las bacterias, pero no contra los virus.