SITUACIÓN ACTUAL: 100.000 habitantes de la sierra de Cádiz tienen como hospital de referencia al Hospital Comarcal Privado-Concertado “Virgen de las Montañas”, ubicado en Villamartín, propiedad de la empresa José Manuel Pascual Pascual, S.A., el cual, tal como se aprecia en la Cartera de Servicios que el SAS tiene en Internet, carece de cardiólogo, carece de endocrino, carece de neurólogo, carece de neumólogo, carece de oncólogo, carece de nefrólogo, carece de diálisis, carece de Unidad de Cuidados Intensivos y, por si fuera poco, tiene una plantilla de profesionales escasísima en comparación con demás hospitales comarcales PÚBLICOS de Andalucía. Además, este hospital privado-concertado carece del programa informático Diraya, por lo que no puede acceder al historial clínico de ningún usuario del SAS y, obviamente, tampoco los sanitarios de los Centros de Salud y de los Hospitales Públicos pueden entrar en las historias clínicas de los usuarios del SAS atendidos en este hospital. Además, los médicos del Hospital Comarcal Privado-Concertado “Virgen de las Montañas” no pueden hacer recetas de la Seguridad Social, por lo que son derivados a los médicos de cabecera o a los Servicios de Urgencia para que prescriban los tratamientos indicados desde el hospital, gastando aún más los ya muy escasos recursos de personal y tiempo, y masificando las consultas aún más.
SANGRÍA A HOSPITALES PÚBLICOS: el hospital comarcal privado-concertado de Villamartín se concertó para acercar los servicios sanitarios públicos a una aislada población de más de 100.000 habitantes y, además, descongestionar los hospitales públicos de Jerez y de Ronda. Pues bien, las graves carencias del hospital comarcal privado-concertado de Villamartín determinan que los pacientes prefieran ir a los hospitales de Jerez y de Ronda. Esta situación provoca un gran derroche de recursos económicos por parte de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, ya que se produce un gran aporte de dinero público al hospital privado-concertado de Villamartín y, sin embargo, los enfermos de la sierra gaditana acuden a los hospitales públicos de Jerez y de Ronda, gastando los recursos de estos hospitales PÚBLICOS y aumentando la ya grave masificación de los mismos. ¿Es comprensible este despilfarro económico?
SANGRÍA A LOS CENTROS DE SALUD: como los médicos del hospital comarcal privado-concertado de Villamartín no pueden hacer recetas de la Seguridad Social, los pacientes que acuden a este hospital para consultas externas de especialidades o para hospitalización deben acudir a su médico de cabecera para que le recete los medicamentos prescritos por los médicos del hospital de Villamartín, lo cual no ocurre cuando los pacientes acuden a cualquier hospital público. Ello supone masificar aún más las consultas de los Centros de Salud y un mayor gasto de los muy escasos recursos públicos, donde no hay dinero ni para sustituir al personal ausente. ¿Es comprensible este despilfarro económico?
SANGRÍA EN FARMACIA: el Uso Racional de los Medicamentos y el ahorro que ello supone en el gasto farmacéutico es un objetivo prioritario de la Consejería de Salud, pues permite derivar el dinero ahorrado a otras actividades sanitarias (construcción de Hospitales y de Centros de Salud, aumentar la Cartera de Servicios, contratar más personal, adquisición de material sanitario, etc.). Pues bien, este objetivo básico de la Consejería de Salud al parecer nada tiene que ver con el hospital comarcal privado-concertado de Villamartín, pues los usuarios comprueban cómo en este hospital apenas se prescribe por principio activo y, además, se prescriben frecuentemente fármacos con nombres comerciales, muy caros, en lugar de prescribir fármacos que con las mismas indicaciones y calidad son mucho más baratos, según garantiza el Centro Andaluz de Documentación e Información de Medicamentos. ¿Es comprensible este despilfarro económico?
ÚLTIMA REFLEXIÓN: es obvio que el fin principal, y legítimo, de cualquier empresa privada es GANAR DINERO; por el contrario, en una empresa pública no hay beneficios económicos. De todo ello se deduce que, a igualdad de prestaciones y de calidad en la gestión, un hospital público cuesta menos que un hospital privado-concertado. Entonces, ¿por qué no se hace público el actual hospital comarcal privado-concertado de la sierra de Cádiz? ¿Es lógico despilfarrar el dinero de todos los ciudadanos en momentos de gravísima crisis económica? ¿ES COMPRENSIBLE Y DE JUSTICIA LA DEMANDA DE UN HOSPITAL PÚBLICO PARA LA SIERRA DE CÁDIZ?
Antonio Rodríguez Carrión, miembro del Consejo de Salud de Ubrique y portavoz del Movimiento Ciudadano ESPECIALISTAS ¡¡YA!!
